Maastricht

El nombre de este ciudad holandesa, limítrofe con Bélgica, ha pasado a la Historia desde la firma en ella del Tratado de 7 de febrero de 1992 por los Ministros de Asuntos Exteriores y los de Finanzas, de los doce Estados miembros de las Comunidades Europeas. En su complejo texto se regula la unión económica y monetaria europea, de una parte, y la unión política, de otra. Contiene disposiciones que revisan los tres tratados fundacionales de cada una de las Comunidades Europeas, con particular referencia al Tratado CEE. Dichas revisiones se incorporarán a los respectivos tratados. Cabe destacar la regulación de la política extranjera y de seguridad común, así como la relativa a la cooperación en el área de la justicia y de los asuntos internos. La prevista expiración del Tratado CECA en el año 2001 conllevará revisiones estructurales de importancia. Este tratado, en definitiva, instituye entre las partes contratantes la Unión Europea, también conocida por sus siglas UE. Lo que en el Acta Unica Europea era un objetivo a alcanzar, ahora es una realidad, al menos de derecho.

Tratado de la Unión Europea, firmado en Maastricht el 7 de febrero de 1992, artículo A.