Deber de exhibición

Es una de las obligaciones que gravan la titularidad dominical de los bienes integrados en el patrimonio histórico. A tal fin, se prevé que los diferentes servicios públicos y los titulares de los referidos bienes han de prestar su colaboración en la ejecución de los planes elaborados por el ente público competente con el fin de facilitar el acceso de los ciudadanos a dichos bienes, fomentar la comunicación entre los diferentes servicios y promover la información necesaria para el desarrollo de la investigación científica y técnica. La utilización de los bienes declarados de interés cultural se subordina a que no se arriesguen los valores que ameritan su conservación.

Ley de Patrimonio histórico español, artículos 35 y 36.